Por Mariano Andrade

NUEVA YORK — Considerado uno de los creadores del arte que buscó expresar el «movimiento de las obras», el venezolano Jesús Soto tiene desde el martes su primera exposición propia en un museo neoyorquino en más de tres décadas, una ocasión para redescubrir a este artista fallecido en 2005.

La muestra, titulada ‘Soto: París y Más Allá – 1950-1970’ y organizada por la Grey Art Gallery de la Universidad de Nueva York, exhibirá hasta fines de marzo unas 50 obras procedentes de museos en Estados Unidos, Francia y Venezuela, así como de colecciones privadas.

«Mi pequeño aporte al movimiento cinético es mostrar que el ojo puede transformar, utilizar la retina (…). Los espectadores son mi motor», señala una antigua explicación dada por el pintor y escultor, nacido en Ciudad Bolívar en 1923 y fallecido en París, en un video que acompaña la exposición.

La Grey Art Gallery presenta la exposición, que tiene como curadora a Estrellita Brodsky, como «la primera muestra a gran escala dedicada a Jesús Soto en un museo de Nueva York en más de 35 años».

Centrada en obras del inicio de su carrera, en particular el período comprendido entre 1950 y 1970 (sus primeros veinte años en París), buscar mostrar «la trayectoria visionaria» del artista, que aportó un «anticipo de estrategias conceptuales más tardías».

Dividida en cinco partes, permite observar la evolución de Soto desde la «abstracción geométrica» de sus obras a principios de los 50 hasta sus «composiciones seriales» inspiradas en la música, que era para él «el arte abstracto por excelencia».

Soto pasa luego a la experimentación con acrílico, ilustrada en sus «espirales» y «estructuras cinéticas», en las que la obra se «mueve» según la posición desde la cual es observada.

Tras innovar con otros materiales como alambre y metal en busca de expresar «la realidad tangible del universo», Soto regresa finalmente a la geometría, las líneas y las estructuras primarias.

Las obras de Soto mantienen, medio siglo después, su modernismo, como las «Vibraciones», juegos de líneas torcidas en grises y negros que buscan representar «una expresion de movimiento», según el propio artista.

La exposición también ofrece una perspectiva de la influencia recíproca e intercambio con otros miembros de la vanguardia artística de su época, como Yves Klein, Jean Tinguely o Marcel Duchamp, con quien participó en la célebre exposición ‘Le Mouvement’ (‘El movimiento’) organizada en París, en 1955.

Estrellita Brodsky, citada en un comunicado de la Grey At Gallery, dijo espera que la muestra «contribuya a incrementar la apreciación por Soto», a quien califica de «figura central del arte latinoamericano».

La Grey Art Gallery es el museo de bellas artes de la Universidad de Nueva York, situado en el histórico barrio de Greenwich Village, en el sur de Manhattan.

Como parte de su programación cultural vinculada con la muestra, la Universidad de Nueva York ofrece una serie de charlas con Brodsky y conferencias.